martes, 3 de marzo de 2009

Simpleza

Ayer mi hijo cumplió 2 años, mi idea (como ya lo habíamos celebrado con todos), era solamente comprar un pastelito, ponerle las velas y cantarle cumpleaños feliz con mi marido, luego se nos ocurrió la “idea” de ir a tomar once a alguna parte…
Partimos a la hora del taco al cajón del maipo a un lugar que nos gusta mucho, nos demoramos mas de una hora en llegar y estaba cerrado…
Plan b… no había plan b, entonces decidimos pasar al mall (cosa que normalmente no hacemos con él) para poder darle su cena y comer algo nosotros que a esa altura la sonajera de tripas parecía concierto.
Pues llegamos y entramos a un negocio que conocíamos, pero que nos trajo la mitad de las cosas pedidas y no en las mejores condiciones, finalmente mi marido partió para otro lado a buscarme algo para comer y se demoró mas de media hora…. Ya era retarde, mi hijo estaba cansado y yo con contracciones, entonces volvió a mi mente la idea del pastel…
Finalmente mi marido llegó y pudimos volver a casa. Por suerte mi hijo se mantuvo despierto y al llegar, cerca de las diez de la noche pudimos tomar el pastel, ponerle las velitas y cantarle cumpleaños feliz, entonces dije, eso era todo lo que yo quería, era tan simple, mi hijo lo disfrutó, nos hizo prenderle la vela varias veces para poder apagarla, era tan, tan simple y nosotros, los adultos nos complicamos tanto…
Nos sacamos fotos, nos reímos un rato y luego a hacer tutito, estábamos todos cansados.

Aun nos falta aprender de mi hijo, y entender que las cosas simples son tan hermosas.

3 comentarios:

Alimontero dijo...

Chiquitita, me creeras que me estaba perdiendo esto tuyo tan bonito??... es decir.. dónde he estado todo este tiempo??
Me ha encantado tu blog, y es más.. te linkearé.. me dejas?? deseo te conozcan...aunque todos sean mayores, mas de algo de tu sabiduría aportarás como siempre!!

Generalmente los adultos, "como adultos" y con "bultos" en nuestra espalda, a estas alturas de la vida, es "común" que nos compliquemos... entonces me digo: Ali, lee nuevamente a Eckhart Tolle y todo vuelve a la simpleza...al "apreciar" las cosas bellas y simples de la vida...
pararnos a observar la naturaleza, que fue tu idea original..., ver, quedarse quiete ahi un instante...y hacerlo enterno en el aquí y el ahora...apreciar el ave que vuela, la hoja que va cayendo, la sonrisa de tu hijo...la mirada amorosa del Benja..y nos olvidamos...en cambio tu pequeño que tiene 3 años, no tiene mochila aún...vive desde el APRECIAR... y absorber todo lo que ve y va "programando conductas".. jejej eso ya lo sabes...
Perdona lo latera.. me fui en la "volá""
Te abrazo, felicidades por todos uds, especial por tí y el Benja...que en un instante sublime de amor trajeron a esta maravilla, vuestro hijo!!

Ali

Alejandra Escobar, aprendiz de madre dijo...

chuta, recien entiendo...
gracias

Anónimo dijo...

post impresionante. Realmente disfruté la lectura de su blog.