sábado, 20 de julio de 2013

En el metro

El otro día venia de regreso a casa en el metro (tren subterráneo) y habían dos mujeres que no eran de esta país, que andaban con un pequeño que debe haber tenido 3 años.
El pequeño estaba durmiendo y de pronto despertó ( iba sentado con su madre) lloró un rato y luego se calmó, la mamá del niño le decía a la otra señora que debía volver (no supe donde)
En algún momento las dos mujeres y el pequeño se bajaron en una estación y conversaron algo, la mamà le pasó la mano del pequeño al otro niño y de pronto la mamá va y se sube nuevamente al metro, el pequeño al darse cuenta se pone a llorar y  a gritarle a la mamá y la señora se lo llevó, yo no supe si siguió llorando o se calmó. Mientras tanto la madre estaba de pie mirando un papel, no se le movía ningún musculo de la cara...No se si porque estaba acostumbrada a esto o porque no quería que nadie la viera llorar o ...quizas que cosa.
Yo me quede con dolor de guata,esa fue mi primera reacción, porque pensé que el niño debió haberse sentido abandonado (tengo tema con eso) y luego recordé que si bien los niños son pequeños creo que siempre es bueno darles, al menos, una explicación de que haremos y porque ellos van a hacer ciertas cosas. Como cuando los dejaba en el jardín, que le decía que lo dejaría ahí y que iría a hacer tal cosa y luego iría por ellos...
Cada uno hace lo que hace por que es lo que sabe. Espero que en esa relación madre/hijo ambos se sientan amados, queridos y entendidos.

1 comentario:

Alimontero dijo...

Es terrible para los niños la sensación de abandono!
concuerdo totalmente contigo en decirle a los pequeños que los dejas y que volverás a buscarlos...
sin embargo no todo el mundo es lo que es, ni lo que aparenta.
Para los pequeños somos SU MUNDO...SIN NOSOTRAS ellos se sienten totalmente desvalidos.
Somos los únicos mamíferos indefensos...

un abrazo Ale,

Ali