Hoy después del tropezón, me dio por seguir ayudando en las labores domesticas, el estar de pie, con todo el peso en un sólo pie ha sido horrible, el uso de las muletas me tienen las manos muy adoloridas y todos los músculos agarrotados.
A veces tengo ganas de llorar…
Yo no debo seguir con el analgésico fuerte, al menos eso decía la orden médica y estoy a veces aguantando el dolor, no me quiero convertir en un House más…
Por las mañanas y ante mi poca movilidad me impaciento, me desespero, se me agota la creatividad y mis 3 hombres sufren por mi idiotez.
Estoy literalmente “pa´ la cagá” y perdón por la expresión, pero creo que es lo que realmente me identifica, e ilustra la situación.
Mas encima es 18 de septiembre en un año de Bicentenario, donde hay muchísimas actividades para realizar, y mi marido le encantaría estar en varias, sin embargo yo no tengo ganas de andar saltando entre la gente ni hacer mas ejercicio del necesario. Hoy para mi la mayoría de las cosas implican un gran esfuerzo y para peor mi estado físico es malena.
Siento que todo este texto es tan pesimista….
Espero que mañana sea un mejor día.
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