Mi compañero del almuerzo: habla mientras come, dice 4 garabatos en una frase de 6 palabras.
Pide primero èl y luego me deja hacerlo yo, habla fuerte, dice lo que piensa mirándote a los ojos, tal vez esto último es lo que menos me impresiona.
Cuando me fui pensaba que hace 10 años atrás probablemente no le habría dado ninguna oportunidad a esta amistad.
Porque mi rigidez sobre comportamiento "adecuado"no me lo permitiría.
Hoy en cambio me río fuerte de lo que me hace gracia y lo disfruto.
Y corta la ensalada perfecto :)
Agradecida de la posibilidad de conocer gente nueva y disfrutarlo.
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