Nuestro destino de vacaciones coincide con el lugar donde las ballenas jorobadas van a parir a sus crías.
Uno de mis sueños en la vida era ver ballenas. Cuando me enteré que íbamos a estar en el lugar y momento preciso para ello, las cosas cambiaron un poco, adoré mas ir a este destino.
Llegamos allá y me puse a averiguar sobre el paseo, por supuesto la condición era hacerlo por mar. Mi único susto era marearme...
Creímos que contratar una pequeña lancha para nosotros con baño y sombra era lo mejor, iríamos los 8. Había que estar a las 9 de la mañana en la playa y la lancha nos recogería... Mi cuñada y sobrina menor no pudieron ir a última hora.
Partimos algo mojados, ya que para subir a la lancha había que entrar directamente por el mar un par de metros.
El mar estaba tranquilo "como una taza de leche" y había otras embarcaciones en la misma situación que la nuestra, lo único era que no aparecía ni una ballena... Al cabo de un rato ellas se mostraron, un poco lejos la primera vez y luego vimos mas y mas y a los ballenatos...Estaba emocionada, estaba feliz, incluso el ballenato nos regaló un par de saltos fuera del agua, LO MÁXIMO. El problema es que me comencé a marear....
Y el supuesto baño portatil era un balde!!! No lo podía creer, todo mal, pedí que nos moviéramos un poco y después de estar algo mas de 2 horas avistando ballenas fuimos a hacer snorkel, sólo mi hermano y mi marido se tiraron al agua y yo no aguanté mas, estaba aferrada al balde devolviendo mi desayuno...En fin.
Rápidamente comenzamos a volver a la playa y de a poco me sentí mejor, el problema es que fui la última en bajar de la lancha y al pararme nuevamente necesité del "baño portátil"... me bajé como pude, pasé directamente al baño, me cambié de ropa y volvía sentarme en la playa con mucho frío. Luego, un par de horas al sol y con los pies enterrados en la arena, hasta que todo se calmó y mis tripitas pidieron algo de comer.
Gracias por la experiencia, un sueño mas cumplido !!!.
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