Mis hijos han sido encantados por estos juegos y tienen en verdad demasiados, me gusta porque los hace desarrollar la creatividad, el tema es que también a ratos sacan lo peor de si, de ellos, de mi, de la familia.
Cada vez que mis hijos comienzan con las peleas por las piezas, por que uno le desarmó algo, porque le quitó nose qué, intentamos que las cosas se arreglen a la buena, una vez, dos veces, tres veces...pues bueno, ayer eso no pasó, entonces se fueron de reto, se comenzó a elevar al voz por parte de todos, advertencias que mis hijos toman como palabras de amenazas ara que ellos hagan lo que les digo, y entonces esos avisos pasarona ser reales y comenzaron los llantos y las palabras feas a si mismos, el descontrol.
Finalmente un poco mas calmada les digo, que los quiero mucho, pero hay cosas que no voy a permitirles, que hay cosas que no andan bien si siguen así.
Me voy todo el camino manejando y pensando que lo sucedido y me pregunto que tan acertado fue mi actuar, y vuelvo a pasar por mi mente toooda la situación y creo que hay cosa que pudieron ser mejor dirigidas.
Hoy mientras meditaba mi corazón se puso inquieto, entonces tuve la certeza que mi actuar estaba errado, que la forma de resolverlo no fue la mejor y que hay que conversar. Que mi forma de actuar fue violenta, fue poco amorosa, fue de una creencia que tengo que debo cambiar para poder formar hijos mas sanos y amorosos
Necesito reforzar en mis hijos lo bellos que son, lo inteligentes que son, cuanto los amor y esta conducta no aporta nada.
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