Deporte

El deporte es nuestra estrella en estos momentos, el país vibra con las diferentes disciplinas y la competencia, yo voy a ver lo que sucede, me gusta ver deportes que nunca había visto, ver la forma en que se comportan los deportistas, pero también como lo hace el público, me sorprendo, me fijo en detalles, no grito, no me sudan las manos, no me visto con la polera oficial, no canto el himno, sólo contemplo, respiro, me hago preguntas, aplaudo a los deportistas, le sonrío a la gente que trabaja para este evento, agradezco tener la posibilidad de estar en ellos. Saco fotos, y disfruto.

Mas un dia

 Siguen pasando situaciones, pero luego recuerdo que hay gente viviendo en una guerra y me digo, lo mio es pasajero, no es grave.

Estoy algo cansada, sin embargo agradezco que esto es cansancio y dolor de cabeza, y sólo eso...

Todo pasa y esto también pasará.

Confesión

 Mentiría si dijera que este tiempo ha sido fácil, la rotura del tendón mas el estrés del día a día me tiene en suspenso y bajo bastante estrés.

El dolor macabro ya pasó, aquel que me hacía llorar y respirar con dificultad. Hoy tengo movilidad, casi como antes. Luego de comenzar la segunda serie de kine donde se trabaja con peso, la dificultad comenzó a notarse, el dolor apareció otra vez, con menos intensidad pero me puso la duda: ahora tendré que vivir además  con este dolor? no podré volver a nadar? no podré volver a sostener los ejercicios prolongados en yoga? en la cocina para todo tendré que usar una batidora ? tengo dudas, la incertidumbre creo que no me ayuda en nada en este rato.

Cadena

 Cómo se puede romper la cadena con la que fue criado el elefante?
Pareciera que no es suficiente solamente ser mas grande, si no que es necesario saber que se es mas fuerte, integrarlo, eso me está costando, tal vez porque tiene un componente de grado del deber que está dando vuelta. Estaba pensando si yo no servía para cuidar enfermos, pero haciendo recuerdos de mi pasado, me ha tocado cuidar ami madre, a mi marido, a mis hijos y todo bien, pero la agresividad y pesadez del carácter de mi papá está siendo abrumador. No se cómo tomar esto. 

A veces es una gran prueba a mi carácter, a mis cambios profundos, a mis creencias pasadas, pero a ratos estoy tan cansada que no me da ni siquiera para hablarle. Como ahora que no quiso ir a su taller y yo no voy a entrar en conflicto de por qué no quiere ir (seguramente por que llueve y limpió los zapatos), pero la verdad no tengo ganas de contradecir, ni siquiera de preguntar, por que no quiero gritos, ni malos tratos, ni garabatos, ni nada, estoy chata, cansada, adolorida, perturbada, por que no sé que hacer